Brasil.- Un estudio identificó omegas-3 en las vísceras de la gamitana (Colossoma macropomum) y del surubí (Pseudoplatystoma sp.). Normalmenteempleados por la industria del pescado en la producción de suplemento para la ración animal, producción de biocombustible y hasta fertilizante, el descubrimiento abre la posibilidad para un mejor uso del residuo, como la producción de cápsulas de omega-3.
El trabajo fue liderado por Embrapa Pesca e Aquicultura (TO), con la participación de Embrapa Agropecuária Oeste (MS) y Embrapa Agroindústria de Alimentos (RJ). Además de incrementar el valor de la cadena productiva del pescado, el aprovechamiento de las vísceras mejorar la sustentabilidad ambiental de la producción.
Generalmente presente en peces de aguas frías, como el salmón y bacalao, la presencia de omega-3 en las vísceras de la gamitana es una buena noticia para la cadena productiva del pez nativo de Brasil. “Es una materia prima que precisa ser mejor aprovechada” destaca Leandro Kanamaru Franco de Lima, investigador de Embrapa Pesca e Aquicultura. Para el científico, el descubrimiento permite otro uso de las vísceras resultantes del procesamiento del pescado. “El productor debe estar atento para no dejar que el subproducto permanezca por largos períodos de tiempo en almacenamiento, debido a que estos ácidos grasos encontrados pueden generar productos de mayor valor agregado” aconsejó el investigador.
De acuerdo a los datos del Instituto Brasileiro de Geografia e Estatística (IBGE) de 2016 revela que la producción nacional de gamitana llegó a las 136 991 toneladas anuales y del surubí alcanza las 15 860 toneladas. No obstante, el nivel de desperdicio y de residuos llega a más de la mitad de la producción, debido a que cerca del 30% del total es aprovechado en filetes. Las empresas grandes utilizan partes de los residuos para producir biodiesel o raciones para animales.
Menos impacto ambiental y más valor agregado
De acuerdo con Kanamaru, el estudio de Embrapa apunta a encontrar una alternativa para las cooperativas y pequeñas empresas de procesamiento de pescado. “Si los residuos sólidos, tales como las mortalidades y vísceras, fuesen aprovechados por la pequeña industria para generar un incremento para las raciones de animales, por ejemplo, la gente disminuiría el impacto ambiental y generaría mayor valor agregado. El problema es que generalmente es descartado” manifiesta el científico.
Ensilado de pescado
Para minimizar el problema, la solución indicada es el reaprovechamiento. “El ensilado de pescado, que es un producto líquido producido a partir de enzimas, es una forma poco onerosa y que independiente de la cantidad de sobras disponibles. Para su elaboración, son utilizados los tejidos y las vísceras de pescado” manifiesta Kanamaru, para que un ensilado se pueda transformar en una fuente proteína para la alimentación animal.
El investigador destaca que muchos frigoríficos no aceptan recibir las sobras de pequeñas cooperativas porque no saben las condiciones de conservación y almacenamiento. “Es un material muy perecible, y su calidad impacta directamente en el valor nutricional final” explicó.
Desperdicio del material noble
El investigador de la Embrapa Agropecuária Oeste, Ricardo Borghesi, resalta que además del uso en la ración existen otras alternativas de utilización y transformación de los residuos de la industria pesquera en productos de alto valor agregado, ofreciendo beneficios sociales, económicos y ambientales. “Podemos citar como ejemplo del uso de residuos el aprovechamiento de la piel de pescado como cuero; para tratamientos de quemaduras humanas; extracción de colágenos; gelatinas; hidroxiapatita (mineral usado para la sustitución de huesos humanos), harina de pescado; hidrolizados proteicos; extracción de aceite; biocombustible; compuesto orgánico; entre otros” enumera.
La tendencia es que, en el futuro, haya el aprovechamiento total del pescado. De acuerdo con Borghesi, las posibilidades son muy amplias, no obstante, eso depende del tipo y de las cantidades de residuos generados, de la materia prima utilizada (especie de pescado, por ejemplo) y de las etapas de procesamiento.
Para Borghesi, a pesar del gran potencial de uso del material residual, algunas veces ese recurso es desperdiciado. Él acredita que esta investigación puede contribuir con la reducción de este desperdicio, pues el conocimiento generado permite un mejor reaprovechamiento de los residuos y contribuye con el desarrollo de tecnologías que garantizan productos de alta calidad y con mayor valor agregado.
Referencia (abierto):
Ricardo Borghesi, Leandro Kanamaru Franco de Lima, Viviane Rodrigues Verdolin dos Santos, Danielle de Bem Luiz. 2017. Caracterização de Resíduos Gerados no
Beneficiamento Industrial do Tambaqui (Colossoma macropomum) e do Surubim (Pseudoplatystoma sp.).
https://ainfo.cnptia.embrapa.br/digital/bitstream/item/164381/1/BP-78-2017-1.pdf
Fuente: Aquahoy.com