Brasil: Esta patente permite mejorar el proceso de masculinización y reduce posibles impactos ambientales
Investigadores de la Universidad Federal de Lavras (UFLA) han desarrollado una innovadora tecnología que revierte el sexo de la tilapia, abriendo nuevas perspectivas en la acuicultura y la producción de alimentos más saludables y sostenibles.
La inversión de sexo en la tilapia tiene varios propósitos y beneficios significativos. Los peces machos, una vez revertidos, presentan características que los hacen más deseables en la industria acuícola. En primer lugar, son más resistentes a las enfermedades, lo que reduce la necesidad de tratamiento médico y los costos asociados. Además, los peces machos son menos agresivos, lo que facilita la gestión de poblaciones en los tanques de producción.
Otro aspecto relevante es que los machos revertidos muestran una mayor uniformidad en el tamaño al momento de la recolección final, lo que simplifica la logística de la cosecha. Además, crecen más rápido, lo que acelera el proceso de producción y mejora la eficiencia económica.
La técnica más comúnmente utilizada para lograr esta inversión de sexo es la hormonal, que implica la adición sustancias masculinizantes al alimento de los peces cuando aún son jóvenes. A lo largo del tiempo, esta hormona estimula el desarrollo de los peces como machos.
La tecnología desarrollada por los investigadores de la Universidad se destaca por su capacidad para reducir la cantidad total de hormona requerida para la reversión del sexo.
Según explican desde la Universidad, la sustancia química encargada de masculinizar los peces, la metilestosterona, se encapsula dentro de una molécula de ciclodextrina. El resultado de esta unión, denominado científicamente como complejo de inclusión, al disolverse más lentamente en el agua, reduce la necesidad de hormonas, como demostraron los ensayos in vitro. Esto no solo hace que el proceso sea más eficiente, sino que también reduce los impactos ambientales al disminuir la cantidad de residuos químicos vertidos en los tanques de producción.
Además, los beneficios de esta tecnología se extienden al consumidor final. El pescado producido utilizando este método es más saludable y de mayor calidad, lo que lo convierte en una opción atractiva para aquellos que valoran la calidad de sus alimentos.
La investigadora Luciana de Matos Alves Pinto, junto con el estudiante de maestría Lucas Bragança de Carvalho, lideraron este proyecto innovador en el Programa de Postgrado en Agroquímica de la Universidad. También contribuyeron al estudio el profesor Luis David Solis Murgas y la profesora Ana Paula Peconick, así como el profesor Tiago Venâncio de la Universidad Federal de São Carlos (UFSCar) y la estudiante de maestría Aline Ferreira Souza de Carvalho.
Todos estos expertos son los inventores de esta tecnología, que ha sido patentada por la UFLA.
Fuente: misPeces.com